Esos son los plazos que maneja el diputado de Infraestructuras.
Imanol Pradales ha señalado que el derribo requerirá de un “enorme” esfuerzo técnico, administrativo y presupuestario.
Pese a que existen “otros compromisos adquiridos” en materia de infraestructuras a corto plazo, el responsable foral ha asegurado en Gernika que su departamento “sigue dando pasos”, iniciando los estudios previos sobre el terreno para conocer los “puntos críticos” y tener, en un plazo de “6 meses” el pliego técnico de licitación para contratar “posteriormente” la elaboración del proyecto constructivo de la variante de Rekalde.
Pradales ha calculado que serán necesarios “116 meses” de trámites y obras de “enorme complejidad” para que Rekalde disfrute de un barrio sin estas barreras de hormigón.