La alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, ha llevado a cabo esta mañana una junta de portavoces municipales «telemática» en la que ha rendido cuentas sobre la gestión realizada por su equipo de gobierno desde que se decretó el Estado de Alarma, el pasado 14 de marzo. La información ha sido trasladada de forma diaria…
El alcalde, Josu Bergara, calcula que se superarán los 200 expedientes. A estas subvenciones a familias sestaoarras en situación límite ; y a las ayudas directas a comerciantes y hosteleros, se destinarán los 250.000 euros que ya no se gastarán en las fiestas de San Pedro.
El Behargintza está enviando cartas para conocer sus necesidades y adoptar medidas concretas. No se cobrará la tasa por instalación de terrazas y se incrementará la partida para realizar campañas de fomento de las compras en el comercio local.
El pasado domingo parte de la fachada se vino abajo por causas que aún se desconocen. En palabras del alcalde, Iban Rodríguez, para ese solar hay previsto un importante desarrollo urbanístico.
Es la forma que tiene el área municipal de seguridad ciudadana de agradecer a los jarrilleros su comportamiento durante los más de 40 días de confinamiento.
Se recupera la tradicional plaza con productos de baserri, aunque con determinadas medidas de seguridad; un único acceso y distancia social entre puestos y clientes. El ayuntamiento dotará también de viseras protectoras a los propios comerciantes.
Han hecho llegar a pequeños comercios, autónomos y profesionales, que siguen diariamente el pie del cañón, 1.400 mascarillas FFP2, más de 100 caretas protectoras y 300 litros de gel hidroalcohólico desinfectante. Lo han comprado ellos mismos con los más de 4.800 euros que han reunido a través de una campaña de donaciones de particulares.
En sus casos, a raíz de la suspensión de fiestas y festejos este verano, han perdido más de una treintena de actuaciones que tenían contratadas.
No en vano, el centro contaba en su haber con un premio a la innovación y sus alumnos desde 4º de primaria venían ya utilizando el ordenador para sus estudios. Aún así, su director, Aitor Elorriaga, cree que , desde el punto pedagógico, hay mucho que aprender de la situación que estamos viviendo.