En una reunión celebrada el pasado día 10, la empresa les aseguró que, en ese momento, tenía muchos metros de tubería insonorizados, y, según sus cálculos, esperaba cumplir con la normativa para la semana pasada.
No ha sido así.
Hoy lunes, 21 de octubre el molesto pitido no sólo continúa, sino que habría ido a peor.
«Estamos como al principio», se lamenta Izaskun, una de las vecinas afectadas.
Por la noche es imposible dormir, y por el día tampoco pueden hacer vida normal, según ha relatado a la redacción de TELE7.