Dónde Barakaldo ve una tragedia porque esta infraestructura ferroviaria discurrirá en voladizo sobre su principal pulmón verde, Ortuella identifica un futuro prometedor.
Unos terrenos degradados, plagados de pabellones industriales a medio desmantelar e hipotecados durante años, a la espera de la realización de las obras para dar salida a las mercancías del puerto a través del túnel del Serantes, y que ahora acogerán, aunque implique molestias para la ciudadanía, la construcción de un falso túnel, tendrán en un futuro un «retorno» para el pueblo en forma de un gran área de esparcimiento y un centro cívico para los barrios de Saugal y Bañales en la hoy semiderruida Casa del médico.
El alcalde, Saulo Nebreda, se ha felicitado por la reciente aprobación del estudio de detalle de la Variante Sur Ferroviaria pues supone, sobre todo, enterrar la «Espada de Damocles» que se cernía sobre Meatzaldea ya que viene a significar el triunfo de la movilización vecinal contraria a que los trenes del puerto compartieran vía con el tren de cercanías de la Zona Minera.