El Ayuntamiento ha puesto en marcha un proceso participativo para dar una respuesta adecuada a la creciente preocupación de la ciudadanía por esta cuestión, sobre todo entre la juventud.
De forma paralela, técnicos municipales, grupos políticos, agentes sociales y expertos trabajarán a lo largo de 2025 para diseñar también un Plan de Bienestar Emocional.