Esta mañana nos hemos acercado para comprobar de cerca el fervor de sus vecinos, y también de aquellos que regresan cada año a este enclave de Ortuella.
Con motivo de la misa la ermita abre sólo hoy en todo el año. Y después, como manda la tradición, a tocar la campana de san Bernabé para pedir el deseo de cada año.