Y es que la villa deberá devolver un millón 700 mil euros de los fondos Udalkutxa porque la recaudación de la diputación ha sido un 6% inferior a los cálculos iniciales.
La crítica de Mikel Torres, secretario general también de los socialistas vizcaínos, no pasa desapercibida, teniendo en cuenta el acuerdo de gobierno PNV-PSE en la institución foral.
El propio Torres aprobará los impuestos de Portugalete en el pleno de la próxima semana gracias al apoyo de los jeltzales en virtud a ese pacto entre ejecutivas.