“Saturación, riesgos psicosociales y síndrome del quemado” son algunas de las situaciones denunciadas por los sindicatos, según afirman desde la formación política.
“El tiempo programado para cada cita es insuficiente, hay una ausencia de limpieza y desinfección de las sillas entre cada cita, y los trabajadores tienen un contacto continuo con documentación susceptible de estar contaminada”, señala el portavoz de Elkarrekin.
Mientras, en» el Ayuntamiento no se realizan controles de temperatura, y no hay señales para derivar a las personas que acceden a las instancias municipales. Un ordenanza es el encargado de acompañarles, al tiempo que hace las veces de portero, en plena calle”, ha añadido Christian Bolaños.