Son ellos quienes deberán establecer su valor patrimonial, y se encuentran estudiando la alegación presentada por el museo de la minería del País Vasco para evitar su derribo
Desde el museo minero ven con tristeza que la “ Casa del Marquesito”, lo único que queda del antiguo pueblo minero; de 100 años de antigüedad y una factura impecable; bien construida, con buena piedra tallada, vaya a desaparecer para que se construyan nuevas viviendas; sobre todo, teniendo en cuenta que el pueblo original de Gallarta fue destruido para dejar paso a la explotación minera.
Piden que no se caiga en el mismo “lamentable error” y se compatibilicen ambos usos.
La Casa del Marquesito era propiedad de Idelfonso Zabala, apodado con ese sobrenombre, y explotador de minas.
Como curiosidad, fue la sede del Socorro Rojo Internacional durante la República.