Recordamos que el ayuntamiento de Barakaldo emitió un comunicado el pasado día 23 de febrero en el que “niega que se haya concedido licencia a Profusa para la demolición de la batería de coque”.
El hecho de que las obras de demolición realizadas carezcan de licencia municipal es de una gravedad extraordinaria, a juicio de la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial, ya que presumiblemente esto supone que se ha obviado el cumplimiento de todos los requisitos legales establecidos en las obras de demolición de instalaciones industriales, tratándose como en este caso de una instalación con importantes contenidos de amianto, naftalinas y otros contaminantes.
https://www.youtube.com/watch?v=SiNdIrmCv3A Ante los posibles riesgos que esto haya podido suponer tanto para los trabajadores de la empresa o empresas que han realizado los trabajos, como para los vecinos del entorno, este colectivo se ha dirigido a la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, a OSALAN y a URA, en requerimiento de información sobre sus actuaciones pasadas, presentes y futuras, en lo que respecta al cumplimiento de la legislación medioambiental vigente .
Desde el derribo de las baterías de coque de AHV en 1995, PROFUSA, sucesora de la S. A. Echevarria (que tuvo fábricas en Bilbao y Barakaldo) era la única empresa que mantenía su actividad en Euskadi, hasta el reciente cierre.
La batería de hornos de coque de PROFUSA, es , según la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial, un elemento tecnológico fundamental en la siderurgia integral y por tanto del patrimonio histórico de la industrialización del País Vasco, y había llegado en perfecto estado de conservación hasta nuestros días.
Este colectivo reclama a las instituciones la paralización inmediata de los trabajos de desmantelamiento de las baterías de coque, así como la salvaguarda y protección para su futura reposición de los elementos y componentes ya extraídos como las puertas de los hornos y tuberías.