Tachan de «traidoras» a las grandes distribuidoras y, «para que se les caiga la cara de vergüenza» por ganar tanto dinero, hoy se han concentrado ante diferentes supermercados de la villa.
En este sentido, han comparado los precios de origen de productos de primera necesidad con lo que después termina pagando el consumidor.
Así, por ejemplo, el incremento es superior al 300 % en el caso de la cebolla o del 600% en el caso de las patatas.