Las denuncias de menores se han sucedido esta pasada noche contra un trabajador de una barraca de fiestas.
En concreto, el empleado que ayuda a acomodarse en la atracción conocida como «la rana», presuntamente, habría aprovechado su trabajo para cometer las agresiones.
En total, 9 niñas, de entre 12 y 14 años, refieren haber sufrido tocamientos.
El hombre de 26 años ha sido detenido por la Ertzaintza.
El Ayuntamiento de Abanto, que ha celebrado inmediatamente Junta de Portavoces, ha condenado los hechos, y convocado una concentración de repulsa para mañana lunes a las 7 de la tarde.
El alcalde, Iñaki Urrutia, elogia la reacción de las niñas, destacando su «valentía», por haber acudido, acompañadas de sus padres, a denunciar la situación.
De esta forma, la Ertzaintza ha podido actuar rápidamente y clausurar la barraca.