“Soledad” le ha llevado a alzarse con el premio Ikasleen Klaketa en la última edición del Festival de Cine Invisible.
Una situación de acoso que este alumno del PCPI Bituritxa vivió durante más de 6 años, en otro centro escolar, y que “trasciende la pantalla para tocar los corazones y remover conciencias”, como ha señalado la alcaldesa Amaia del Campo.
“Como en todas las guerras, muchos soldados, demasiados, nunca vuelven a casa” pero Eder, un chaval de 18 años, es uno de esos “soldados” que a pesar de las vicisitudes sí ha logrado cambiar ese final.
Con su corto, grabado con su propio móvil y con la ayuda de varios profesores del centro y de su ama, Aguirre lanza un mensaje a las personas que se encuentren pasando por lo mismo: «De esto se sale. Es importante cambiar el entorno. Pero se sale».