Otras dos personas son también investigadas por ello
Agentes adscritos a la Ertzain-etxea de Muskiz detenían, en la madrugada del pasado sábado, a dos individuos de 44 y 51 años de edad, acusados de un delito de tráfico de drogas. Presuntamente, ambos individuos utilizaban un bar de la calle Eusko Gudariak de Abanto para traficar con drogas. Además, otras dos personas se incluían en calidad de investigados por los mismos motivos.
Desde mediados del pasado mes de abril, la Ertzaintza tenía la sospecha de que un bar de la calle Eusko Gudariak de Abanto se estaba utilizando para traficar con drogas, en virtud de ciertas informaciones en tal sentido. Por ello, ponía en marcha una investigación con el fin de confirmar esta posibilidad.
La investigación permitía a sus responsables confirmar que en el citado local se producían determinados encuentros, entre supuestos clientes del bar y los responsables del mismo, que podían hacer pensar que, efectivamente, se estaba utilizando para realizar compra-ventas ilícitas de droga.
Así las cosas, la Ertzaintza ponía en marcha, en la madrugada del pasado sábado, un operativo en el citado local. En primer lugar, los agentes comprobaban cómo diversas personas se acercaban al camarero, con el que intercambiaban algunas palabras y al que entregaban una cantidad de dinero, supuestamente a cambio de una consumición, para que instantes después les hiciera pasar a los baños del bar, donde se encontraban con el propietario para, acto seguido, salir y encaminarse al exterior, abandonando el bar. Este proceso se repitió en varias ocasiones, siempre en presencia de la copropietaria del bar. Además, varias de estas personas, una vez que salían del bar, eran interceptadas por ertzainas participantes en el operativo, comprobando así que se encontraban en posesión de pequeños envoltorios conteniendo un polvo blanco que, según les confirmaban, se trataba de cocaína que acababan de comprar en el bar.
Ante estos hechos, los agentes informaban a los dueños del bar del operativo policial en marcha, procediendo a continuación a registrar a los allí presentes. Así, encontraban en poder del propietario del local 3 envoltorios con polvo blanco y más de mil euros en metálico. En poder de la copropietaria del mismo hallaban otros dos envoltorios y en poder del camarero, 3 más y 300 euros en metálico. Asimismo, en poder de otros dos clientes hallaban otros tres envoltorios más, mientras que a un tercer supuesto cliente le localizaban un total de 82 envoltorios escondidos en dos paquetes de tabaco, entre su ropa. Igualmente, un perro de la Unidad Canina de la Ertzaintza localizaba, escondidos entre dos bidones en la parte trasera del bar, otros tres envoltorios más.
Por todo ello, los responsables de la investigación procedían a la detención del propietario del bar, un varón de 51 años de edad, y de uno de los supuestos clientes, al que le habían localizado un elevado número de envoltorios preparados para su venta, un varón de 44 años, bajo la acusación de un delito de tráfico de drogas. Además, informaban a la copropietaria del bar y al camarero su cualificación como investigados por el mismo delito.