Tras los incidentes de ayer, hoy han protagonizado una nueva acción pacífica en la planta de Sestao; a la llegada de los autobuses con los empleados que acuden a trabajar escoltados por la Ertzaintza, les han dado la espalda y han levantado los brazos.
De esta forma, han querido simbolizar, en primer lugar, que, en contra de lo que «ha querido vender » la dirección de la empresa , no son violentos, algo que, a su juicio, además, ha quedado demostrado con las imágenes de ayer.
En segundo lugar, los huelguistas han querido trasladarles al resto de compañeros que van en esos autobuses que «esta es la lucha de todos y todas» .