Las lonjas de jóvenes de Portugalete cuentan con un medidor de ruidos en forma de semáforo.
Cuando se superan los decibelios deseados, se pone en rojo. A su vez, permite hacer un seguimiento del comportamiento de los chavales. En la actualidad, el proyecto de Portugalete; en su momento, pionero, lo conforman 900 jóvenes distribuidos en más de medio centenar de lonjas.