Algunos usuarios han criticado la imposibilidad de acceder a los servicios que ofrece este centro, el más céntrico de la localidad marinera; para aquellas personas que también son socias de alguno de los otros 2 hogares del jubilado que hay en la localidad; en Kabiezes y San Juan.
Los afectados se han visto obligados, por ejemplo, a renunciar a participar en la coral o a hacer uso de la peluquería.
EHBildu apoya a los denunciantes, y pide al Ayuntamiento que «intervenga» pues los centros de mayores están subvencionados con el presupuesto municipal.
La coalición abertzale recurre a un símil: «Es como si a un santurtziarra, por ser socio de 2 de los equipos de fútbol de la localidad, no le permitieran acceder al campo de uno de ellos».
Desde la junta directiva del centro Nagusiak de San Jorge explican que la normativa data de los años 90 pero han decidido aplicarla ahora porque «no dan abasto «.
Han cerrado 2023 con 796 socios; cerca de 200 más que el año anterior.
Ante la creciente demanda, se están viendo obligados a desdoblar clases de yoga o memoria, y aún así hay lista de espera.
Les parece, por tanto, injusto que una persona mayor que acude, por ejemplo, al centro del barrio San Juan para acceder al descuento de más del 50 % en los viajes, se beneficie de otro tipo de actividades también en el de San Jorge «cuando hay gente que se queda fuera».
Nagusiak San Jorge invierte la aportación municipal en la amplia variedad de talleres y actividades que ofrece, en lugar de subvencionar viajes.
Por su parte, el Ayuntamiento de Santurtzi, al margen del apoyo económico, no tiene competencias para intervenir en los estatutos que rigen dichas asociaciones, y su labor se limita a garantizar la no discriminación de las personas asociadas por razones de género o raza.
En este caso, la decisión tomada por parte del Nagusiak San Jorge, es una propuesta de su junta directiva avalada en una asamblea por las personas asociadas