La Policía detuvo el pasado miércoles 9 de mayo a un hombre de 44 años como sospechoso de tráfico de drogas en Barakaldo. El rastreador vendió las drogas desde casa y los consumidores fueron a casa a comprar drogas. Tras entrar en la vivienda y barrerla, encontraron 250 gramos de speed, 16 bolsas de cogollos de marihuana, hachís y una mezcla de sustancias repartidas por distintos puntos de la vivienda.
La detención es fruto de una investigación llevada a cabo por la Sestao Ertzain Etxea contra el tráfico y consumo de estupefacientes en Barakaldo. El estudio se centró en un hombre de 44 años que tenía antecedentes de posesión y consumo de este tipo de sustancias y supuestamente vendía drogas, especialmente speed, desde su casa. Estas ventas de drogas las hacía en casa, en la mayoría de los casos en el portal, y de forma visible para vecinos y transeúntes.
Una investigación policial pudo comprobar que varias personas se dirigían al domicilio del sospechoso a comprar las sustancias. En algunos casos contactaban al hombre a través del portero, y la droga se traficaba en el portal o dentro de la casa. En otros momentos, los agentes a cargo de la investigación pudieron ver que el imputado salía al balcón y tiraba la droga envuelta a la calle, donde esperaba el comprador.
Así, el pasado martes, durante uno de estos operativos de vigilancia, la Ertzaintza detuvo a uno de los compradores en la calle tras comprar droga en el portal. Cuando lo registraron, los oficiales le quitaron una pequeña bolsa, una dosis de unos pocos gramos de speed.
A raíz de las pruebas, el juzgado ordenó el registro de la vivienda e investigó 250 gramos de speed (anfetamina), 16 bolsas de semillas de marihuana, trozos de hachís y otras sustancias comúnmente utilizadas para mezclar drogas.
El imputado, de 44 años, fue trasladado a la sede de la Ertzaintza en Sestao para desempeñar sus funciones como policía. Una vez cumplidas estas, se ponían en manos de la autoridad judicial.