Debido a la situación de pandemia, los espacios existentes han reducido su aforo a la mitad, y no son suficientes para satisfacer la demanda existente, argumenta la portavoz, María Solar.
Señala que Barakaldo cuenta con espacios municipales que se podrían adecuar para este fin. Los topalekus, los equipamientos deportivos, las aulas de cultura, y otros locales vacíos.
Además, según ha explicado, el Ayuntamiento tiene dinero suficiente para atender los gastos que suponen el personal necesario de limpieza o de portería para abrir estas aulas.