El ascensor de La Atalaya lleva al menos mes y medio averiado, con el agravante de que las escaleras alternativas no se encuentran tampoco en buen estado, según apunta la coalición.
«Están llenas de verdín, suciedad y maleza, por lo que subir o bajar por ellas se ha convertido en un acto de riesgo «, se lamentan.
Tienen constancia, al menos, de una caída con resultado de lesiones.