Una de ellas es una persona del colectivo feminista local, Emari.
La coalición abertzale quiere saber quién dio la orden para que 6 agentes de la policía municipal; todos los que en ese momento se encontraban de servicio, se presentaran en el stand de prevención de agresiones machistas para realizar el test de alcoholemia a ambas mujeres, dejando “desasistido” el pueblo en una de las noches de fiestas de mayor afluencia de gente.
Por cierto que el resultado fue 0.0.