Y es que en octubre el Ayuntamiento ya tenía un anteproyecto para renovar los 2 primeros kilómetros de la carretera, y fue entonces cuando Diputación cambió de criterio, e indicó que el vial debía ser reformado por completo.
La legalidad no permite fraccionar los contratos, y, por este motivo, el consistorio debe convocar una nueva licitación para los 2 kilómetros restantes.
Edu Briones entiende el malestar de los vecinos por el retraso pero «los tiempos de la administración no van tan rápido», ha explicado.
Eso sí, el primer edil ha expresado públicamente «el compromiso de que eso se va a hacer».
La plataforma vecinal Larrigadakoak ha denunciado la peligrosidad de una carretera en la que, a lo largo de 4 kilómetros, desde el Ayuntamiento hasta Kobaron, no hay ni aceras ni semáforos o pasos de cebra.