Mikel Torres ha pedido que se “investiguen las circunstancias de este terrible suceso que ha acabado con la vida del trabajador”, especialmente; ha dicho,” todo aquello relativo a las medidas de seguridad que debería tener para trabajar en altura”.
En palabras del primer edil jarrillero, “se demuestra ,una vez más, lo necesario de todas las medidas de prevención y salud laboral para garantizar la seguridad de los trabajadores”.
La investigación policial deberá determinar ahora si el operario, fallecido al precipitarse al vacío desde el tejado de un edificio de viviendas en rehabilitación de la calle Bailén, llevaba puesto arnés de seguridad o , en su defecto, el motivo por el que ha fallado la sujeción.
La Ertzaintza se ha hecho cargo de la investigación.
Por otro lado, según informa el sindicato CCOO, atendiendo a los datos facilitados por OSALAN, el trabajador tenía 45 años y pertenecía a la empresa Bravo Lanak SL.
Se encontraba realizando labores de reparación en una bajante y ha caído por el borde de la cubierta del edificio de cinco plantas, concretamente desde una altura de unos 16 metros.
El sindicato convoca una concentración el jueves 25 de noviembre a las 11:00 en el barrio bilbaíno de Rekalde ante la sede de la empresa (calle Gordóniz 44).