El alcalde, Saulo Nebreda, considera que este incremento no tendrá impacto real en los bolsillos de los vecinos.
Se establecen, además, bonificaciones de un 50% en los servicios municipales para todos los vecinos que estén en paro. E, incluso, en los casos recomendados por los servicios sociales, las familias con verdaderas dificultades quedarán exentas.