Los trabajos han tenido un coste de 512.000 euros y se han prolongado durante un periodo de ocho meses y han afectado a un tramo de 150 metros de longitud comprendido entre las calles Concepción Arenal y Marcos Grijalvo.
Antes de comenzar las obras, la vía se encontraba en malas condiciones por el paso del tiempo, siendo la escasa adherencia de las aceras el mayor problema que presentaba. El área de Obras y Vías Públicas ha aprovechado la ocasión para llevar a cabo una reforma integral de toda la zona. De esta manera, según marcaba el proyecto aprobado, se ha llevado a cabo la renovación de las redes subterráneas de abastecimiento y saneamiento, la reconstrucción de las aceras para eliminar barreras arquitectónicas y el reasfaltado de la calzada. También se modernizará el alumbrado público y se ha dejado preinstalada bajo la calle la tubería para el futuro sistema de recogida neumática de basura.
Como viene siendo habitual en aquellas actuaciones de renovación urbana que cuentan con financiación municipal, el Consistorio ha obligado a la empresa adjudicataria a contratar a personas desempleadas de la localidad. En este caso han sido dos los trabajadores seleccionados a través del Behargintza para incorporarse a la obra.