Un centenar de mayores dependientes vivirán en unidades convivenciales de un máximo de 20 personas cada una, y los jóvenes residirán en apartamentos dotacionales en régimen de alquiler.
Para ello se derribará y posteriormente se levantará un nuevo edificio en la actual Nagusien Etxea de Romo.
Se trata del primer centro intergeneracional del Estado que contará con espacios comunes, y otros independientes.
Las obras comenzarán a finales de este año, con una inversión que alcanzará los 16 millones de euros.