El equipo de gobierno de Barakaldo quiere aclarar que no se ha realizado ningún cambio en los criterios de admisión de las usuarias y usuarios del albergue provisional para personas sin hogar. Las aclaraciones responden a las afirmaciones vertidas esta mañana por el colectivo social Berri Otxoak tras la muerte por causas naturales de un hombre que dormía en un cajero.
Los criterios para acceder al servicio son las mismas que en los últimos años: contar con un documento identificativo, haber pasado por los servicios sociales del municipio o haber acudido al centro acompañado por la Policía Municipal. Las usuarias y usuarios deben ser mayores de edad, no padecer enfermedades físicas o psíquicas que requieran de hospitalización y no presentar trastornos de conducta que puedan alterar el normal funcionamiento del centro y perjudicar el descanso.
Una vez utilizando el servicio, las y los usuarios deben respetar las normas de convivencia establecidas en el reglamento que la propia persona firma a su entrada; normal que se basan principalmente en el respeto a las personas del centro y a las instalaciones; la prohibición de incluir bebidas alcohólicas y drogas, y la prohibición de llevar arma blanca y objetos punzantes o peligrosos.
Las normas están establecidas desde la puesta en marcha del servicio y coincide con la que rige en el resto de alojamientos sociales de la zona. Por ese motivo, el equipo de gobierno quiere desmentir las acusaciones realizadas por la plataforma social y condenar el intento de utilización política que están tratando de realizar sobre este desgraciado asunto.
Por otro lado, es necesario subrayar que la persona fallecida contaba con el apoyo del equipo de atención a personas sin hogar desde su llegada al municipio, estaba atendido por las trabajadoras sociales del Ayuntamiento y por entidades del tercer sector y era usuario de los recursos municipales existentes, entre ellos el albergue, en el que estuvo en varias ocasiones.
