Después de ocho meses sin servicio, el ferry Cap Finistère de Brittany Ferries retoma este martes, 20 de julio, su ruta entre el Puerto de Bilbao y el puerto inglés de Portsmouth con tres conexiones por semana (martes, viernes y domingo).
Desde hace diez años, este ferry da servicio en el Puerto de Bilbao tanto a carga rodada como a pasajeros, y solo este año ha tenido un parón tan largo debido a la pandemia.
La naviera cuenta, además, con conexiones para carga y pasajeros con Rosslare, en Irlanda, y la exclusiva de carga que conecta con el puerto de Poole, al sur de Inglaterra. Todo ello demuestra el firme compromiso de Brittany Ferries con este enclave.
Tras las adversidades por la crisis de la COVID-19, Brittany Ferries encara el futuro con optimismo y con un claro objetivo: la recuperación económica. Uno de los pilares fundamentales para esta recuperación es la apuesta por la transición energética, con barcos que navegarán gracias al GNL (gas natural licuado).
A comienzos de 2022, el Salamanca será el primer buque de Brittany Ferries que navegue gracias a este combustible y conectará, precisamente, el Puerto de Bilbao con Portsmouth. Sus 215 metros de eslora le convertirán en el más largo de la flota y podrá llevar hasta 1.015 pasajeros y transportar hasta 2714 metros lineales de vehículos de pasaje y camiones.
Supone un importante ahorro en el consumo de combustible y en las emisiones, al tiempo que promete una mejora del 10% en la capacidad de pasajeros y un aumento del 28% en el espacio de carga. Al ferry Salamanca se le unirá en 2023 el Santoña.