Olga Casas apareció muerta en el jardín del colegio de Las Javerianas y, 3 décadas después , su crimen ha quedado impune.
Su hermano, Victor, se ha situado hoy ante el Ayuntamiento de Portugalete, declarándose en huelga de hambre para denunciar el desamparo institucional que ha sufrido su familia.
En el lugar de los hechos, según relata, se halló el ADN de 4 sospechosos; 4 «asesinos» que aún están en la calle, se lamenta.
Denuncia también el nulo trabajo policial para esclarecer el asesinato de su hermana, que sólo tenía 19 años.