Gracias a ellos el complejo sanitario evitará la emisión anual de 39 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
Además, permitirá un ahorro energético de 130.000 kilovatios hora, lo que supone una reducción del consumo anual del 5,7%.
La tecnología comenzará a estar plenamente operativa el próximo mes de mayo.
Los paneles ocupan una superficie de 116 metros cuadrados del tejado de la capilla del hospital, y las dos alas principales del edificio central.