En una primera fase fruto de la extinción por el Ministerio, en 1998, de la concesión que disponía la antigua CAMPSA en la zona para instalaciones de almacenamiento de productos petrolíferos, y tras un largo proceso judicial, se logró que la inversión privada acometiera inversiones por valor de 7 millones de euros, procediéndose a levantar las instalaciones de la empresa CLH, S.A. (antigua CAMPSA) y a regenerar el entorno colindante a la playa, en una actuación pionera en Europa por su tipología y por sus dimensiones, llegándose a recuperar ambientalmente del orden de 165.000 metros cuadrados de terreno.
La actuación que ahora se licita tiene el objetivo de dotar a la playa de una comunicación longitudinal con la construcción de una pasarela peatonal de cerca de un kilómetro, así como la restauración de su zona dunar.
El presupuesto de licitación es cercano a 1,5 millones de euros, a financiar en su integridad por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y el plazo de las obras, que se iniciarán este año, se ha estimado en 12 meses.