Sus gestores han encontrado una fórmula para dotarse de financiación, tras haber perdido la ayuda del departamento vasco de salud.
Hoy la han presentado en el marco de una asamblea
La nueva vía consiste en presentar proyectos en otros departamentos del Gobierno Vasco para poder acceder a subvenciones.
Y para recibir el visto bueno a sus propuestas , quieren demostrar que, tras este servicio ahora desaparecido, hay “una masa crítica” ; esto es, un grupo numeroso de personas que respaldan su labor, constituyéndose en socios colaboradores.
Calculan que entre 600 y 800 personas han perdido la atención psicológica que el módulo les dispensaba, y en su centro de salud han de hacer frente ahora a una espera de entre 6 y 8 meses para ser atendidos.