La iniciativa trata de proteger a los 600 habitantes del “pulmón verde” barakaldés ante los peligros que los vecinos puedan sufrir.
Y es que estos lugares son susceptibles de padecer inundaciones, incendios o desprendimientos de tierra.
EH Bildu, no obstante, considera que hay aspectos que son se han tenido en cuenta.
Es el caso de “las vías de transporte de mercancías peligrosas, las conducciones de gas o las torres de alta tensión”.