Según señalan, el negocio clandestino, ubicado en una lonja del barrio de Lutxana, estaba
equipado para albergar hasta 100 animales.
El local fue descubierto a raíz de la denuncia interpuesta por la comunidad de propietarios del
inmueble a causa de los ruidos y olores que se originaban en el lugar.
El portavoz de Elkarrekin, Eder Álvarez, ha explicado que por lo que se desprende
en el primero de los informes policiales, “el local cuenta con unos 10 contenedores de
plástico de 1,5 metros de ancho por 3 metros de largo y un metro de altura, en cuyo interior
se encontraban en cada uno de ellos, unos 10 cachorros de diferentes razas incluso mezclas de
estas”.
El concejal de la coalición, Eder Álvarez, ha tildado el caso de “extrema gravedad”,
ya que, según según las informaciones, “ha habido hasta un centenar de animales en la lonja”.
Pero el asunto no acaba ahí. En una intervención posterior, la policía local observó esta vez
“aproximadamente 35 cachorros de diferentes razas”. Además, el decreto en el que se basa la
coalición afirma que “no consta en los archivos municipales título habilitante para el
desarrollo de la actividad”, por lo que el Área de Desarrollo Sostenible ha ordenado la
clausura inmediata del local, señala.
“Nos preocupa sobremanera qué es lo que ha podido ocurrir con los animales ahí
hacinados, más si cabe cuando desde el informe de septiembre al de octubre, en un sólo mes,
ha pasado de un centenar de animales a tan sólo 35” ha apuntado Álvarez, quien ha pedido
que el consistorio “actúe de oficio para asegurar la seguridad de los mismos”.
Finalmente, el concejal de la coalición ha denunciado que tras una breve investigación han
conocido que el responsable de la actividad ha sido sancionado por motivos similares en otros
territorios.
“No hemos tenido que buscar mucho para encontrar sanciones a este individuo por
motivos parecidos en Castilla y León, por lo que pedimos al Ayuntamiento que se persone
inmediatamente como demandante por posible delito de maltrato animal”.