La Diputación Foral de Bizkaia ha realizado una serie de trabajos de estabilización de la ladera y ha establecido un primer recorrido circular entre Ermu y Urizarreta, sin llegar a la zona donde se produjo el desprendimiento.
A finales de julio se podrá reabrir el tramo Ermu-Lurgorri y a comienzo del otoño podría visitarse de nuevo el islote y la ermita.
Se mantendrá el sistema de ticketing digital y los controles de accesos que funcionaban antes de que se produjera el desprendimiento que obligó a cerrar el acceso a este enclave.
Para garantizar también que se cumplen las medidas de protección frente al COVID-19, se mantendrá la limitación de 960 personas al día, con un recorrido de sentido único.