Es la consigna que han coreado hoy los jubilados de Barakaldo para dejar claro que, pese a la caída de Rajoy, ellos siguen en la brecha.
En el ayuntamiento debían pensar que dejaban las movilizaciones pues hoy se han olvidado de ponerles megafonía.
Aún así, los pensionistas se han apañado para difundir alto y claro su mensaje.
Continuarán su lucha porque ni siquiera confían en que se vaya a respetar la subida que el PNV había pactado en los presupuestos generales, que podría ser enmendada por el PP aprovechando su mayoría absoluta en el senado.