La Ertzaintza detuvo la semana pasada en Barakaldo a un hombre y a una mujer, de 33 y 20 años, respectivamente, tras culminar un operativo conjunto con Policía Nacional por tráfico de drogas que comenzó hace 7 meses.
Durante ese periodo de tiempo, las y los agentes comprobaron que el varón se dedicaba al tráfico de estupefacientes, introduciendo las sustancias en la península a través de los puertos situados en el Campo de Gibraltar. Posteriormente, ayudado por colaboradores de la zona de la Costa del Sol en Málaga, trasladaban la droga hasta Euskadi en vehículo, ocultando el grueso de la misma en un trastero de Barakaldo.
El martes, 12 de septiembre, los investigadores observaron al hombre dejar una bolsa de viaje de grandes dimensiones en el interior del trastero.
Cuando regresó, los recursos policiales intervinieron y descubrieron que el sospechoso portaba un paquete que contenía medio kilo de hachís.
Por ello, ertzainas del dispositivo examinaron el trastero, y localizaron una maleta con 38 paquetes de hachís con un peso total de 35 kilos; además de una bolsa de plástico que contenía 250 bellotas de hachís, con un peso de unos 3 kilos.
En otras partes del trastero, encontraron 10 tabletas más de hachís, con un peso total de 1 kilo.
El hombre fue detenido en ese momento, acusado de un delito de tráfico de drogas.
Seguidamente, los agentes se dirigieron al domicilio, y procedieron a detener a su esposa por el mismo delito.
Con la oportuna orden judicial, seguidamente, la Ertzaintza accedió al domicilio de la pareja donde se realizó un registro, localizando unos 200 gramos de hachís, 20.500 euros, además de diversos objetos supuestamente relacionados con el delito, como balanzas de precisión y varios relojes y joyas de los que se continúa investigando su posible origen ilícito.
Los dos detenidos fueron puestos a disposición judicial el pasado viernes, decretándose por parte del Juzgado de Guardia de Barakaldo el ingreso en prisión del hombre y la puesta en libertad de la mujer.
Por parte de la Policía Nacional, la operación continúa abierta y a la espera de practicar nuevas detenciones en la Costa del Sol.