En estos momentos, en Bizkaia, cerca de 6.000 personas tienen a un familiar o allegado como representante legal o voluntario.
A través de este servicio, se les ofrecerá información y asesoramiento para el inventario de bienes, rendiciones de cuentas, solicitud de autorizaciones judiciales, etc.
El diputado de Acción Social, Sergio Murillo, considera que un tutor “es quien mejor puede interpretar la voluntad, deseos y preferencias, y acompañar mejor la toma de decisiones de las personas que hayan visto modificada su capacidad”.