Sus responsables han perdido ya la cuenta del número de cristales rotos.
Ayer y hoy se han visto obligados a presentar de nuevo sendas denuncias ante la Ertzaintza.
El ayuntamiento es conocedor de esta situación desde hace tiempo pero nunca se han tomado medidas.
Con mayor rapidez, desde luego, se han librado de una colonia de avispas asiáticas, que les ha visitado este verano, y que ayer ha sido retirada por los bomberos.