El ayuntamiento de Getxo ha informado a la asociación Ibar Nagusien Etxea, en una reunión mantenida esta mañana con sus representantes, que tendrá la posibilidad de seguir organizando sus actividades en la parte de la Nagusien Etxea de Romo destinada a ellas, mientras no se produzca el cierre del centro. Esto quiere decir que las personas asociadas podrán continuar realizando sus actividades (charlas, coro, talleres…) en la parte baja del centro, tras rechazar la asociación Ibar Nagusien Etxea el ofrecimiento del Ayuntamiento para trasladar toda su actividad a la Romo Kultur Etxea, RKE.
A partir del viernes, día 18, los servicios básicos de peluquerías de hombres y mujeres, masajista y podología con nuevos equipamientos, sala de billar y gimnasio (a partir del día 28) se prestarán en la Romo Kultur Etxea, lo que supondrá el cierre de los mismos en el edificio de la calle Lope de Vega ya que, en aras a una lógica de gestión eficiente, no se contempla la duplicidad de los servicios. También con el objetivo de aprovechar los recursos existentes, los antiguos equipamientos de los citados servicios serán trasladados a la residencia municipal, para su utilización.
Sin embargo, los mayores acusan al ayuntamiento de “desmantelar” la Nagusien Etxea.
La estrategia de los responsables municipales, según sus sospechas, sería “vaciar de contenido” el edificio. Llevarse el material a la residencia tiene, en su opinión, una clara intención de “boicotear” su actividad.
Alertan, además, de que, al trasladarlos a la nueva Kultur Etxea de Romo, el consistorio obliga a los trabajadores de los servicios de podología, peluquería y masajista a incumplir su contrato con la junta, que está vigente hasta el 31 de diciembre.
Además, se han enterado por la prensa de que el gimnasio y el billar también se cierran el viernes; algo de lo que, según aseguran, no se ha hablado en la reunión de esta mañana.
Su malestar se resume en la siguiente frase; “Nos dejan vivir, pero ,en realidad, se trata de una muerte a corto plazo”, pues obligarán a los usuarios a cambiar de edificio dependiendo de la actividad que vayan a realizar.