Así lo denuncian los vecinos que aún «resisten» en estos bloques 24 y 26 de José Miguel de Bararandiaran.
Una céntrica parcela ; muy golosa para las constructoras , que han ido comprando pisos y alquilándolos a personas que enrarecen la convivencia.
A medida los vecinos se van marchando, los nuevos inquilinos van ocupando el resto de las casas.
Ana sufre diariamente insultos y amenazas;hace un llamamiento desesperado de ayuda al pueblo de Santurtzi y al ayuntamiento.