El Ayuntamiento incluye en los presupuestos de 2022 una partida de 700.000 euros para la adecuación de esta zona de baños.
La playa lleva años perimetrada por un muro para evitar que las mareas se lleven la poca arena que aún queda.
El propio alcalde, Iñigo Ortuzar, reconoce que estéticamente la imagen deja mucho que desear.
Los vecinos han venido reclamando una solución, y ésta pasa por crear un solárium escalonado y un acceso al agua mediante una rampa con suelo antideslizante desde la parte del paseo de los puentes.