Es sólo una de las deficiencias denunciadas por el sindicato LAB a la que se suman la falta de agua caliente, o el hecho de compartir espacio con escombros y papel de embalar, en el segundo piso.
Por si esto fuera poco, este centro de apenas 5 años, no tendría permiso de habitabilidad.
Es un claro ejemplo, denuncian desde el sindicato abertzale, del abandono que sufre la atención primaria.