El conjunto de iniciativas en materia de saneamiento supondrán para este ejercicio 2023 una inversión de 30 millones de euros.
La partida más importante, por encima de los 9 millones, se destinará a continuar con los trabajos del tanque de tormentas de Galindo.
Se trata de grandes depósitos subterráneos que tienen la misión de acumular una parte del agua que desbordaría de los colectores en momentos de precipitación intensa, normalmente, la que lleva mayor carga contaminante.
Cuando cesan las lluvias y se normaliza el caudal de entrada a las depuradoras, se incorpora al tratamiento de forma gradual.
De esta forma, los tanques reducen la cantidad de aguas sucias que llegan al medioambiente sin el adecuado tratamiento.
Importante es también la inversión prevista en Muskiz con el objetivo de eliminar la salida del efluente de la EDAR al estuario del Barbadún.
Para ello se está redactando el proyecto de una conducción de vertido a mar desde la propia depuradora hasta un punto de vertido situado en el arranque del rompeolas de Punta Lucero.
Con esta conducción, que modificará el punto de vertido actual de la depuradora, aumentará la garantía ambiental en el entorno de la playa de La Arena.
Esta actuación prevé este ejercicio una partida de 2,4 millones de euros.
En este ejercicio se contempla también un importe de 4 millones de euros para continuar con las obras de ampliación y mejora de la EDAR de Muskiz que concluirán en 2024.
En este apartado se encuentra la obra de Renovación y mejora del Tratamiento Primario de la EDAR Galindo que fue declarada de Interés General del Estado.
Así, en el Plan Estratégico Galindo 2030 que actualmente está desarrollando el Consorcio de Aguas se contempla la ampliación y mejora del desanerado, desodorización y mejora del edificio de bombeo, entre otras actuaciones, tendentes a mejorar su integración en el entorno inmediato, fomentar la recuperación energética y el ahorro de energía y mejorar la eficiencia en el proceso de depuración.