Acogida desde hace 3 semanas por una familia de Muskiz, aún no ha obtenido ni permiso de trabajo ni de residencia.
Y ella quiere trabajar…
Esta joven, que hace un mes contaba con un buen empleo en Kiev y, junto con su novio, albergaba un futuro con ilusión, tiene claro que quiere depender de sí misma.
Mientras, se refugia en casa de Mari José, que hace más de 25 años la acogió también cuando era niña.