Maite Lopategi, de 77 años de edad, ha podido recuperar hoy el caserío donde nació, tras el desalojo dictado por un juzgado de lo civil.
Y lo ha encontrado lleno de escombros y suciedad; pintadas en las paredes, ropa y todo tipo de enseres diseminados por el suelo, restos de fogatas en el interior de las habitaciones…
La anciana denuncia ,además, que su propiedad ha sido saqueada; han desaparecido las herramientas de su hermano, así como buena parte de los muebles de la casa, que, presuntamente, han utilizado para hacer fuego.
Hace casi un año, la jueza desestimó su demanda penal; Es por esto que todos estos destrozos no tendrán consecuencias para los ocupas.
La afectada, en declaraciones a TELE7, se siente «humillada», y califica de «inmoral» e «indigno» el desamparo que ha tenido que vivir a su avanzada edad.
Se da la circunstancia de que los ocupas de su caserío son los mismos que han puesto en pie de guerra a los vecinos de Cruces; uno de ellos ha ingresado recientemente en un centro de menores por su relación con los robos con violencia ocurridos en el barrio..