Algunos de ellos con objetos de valor histórico en su interior, como una cartilla de racionamiento de pan, una tarjeta de compra-devolución de libros de un establecimiento de París, recortes de periódico y sellos de librerías de Moscú, México o Nueva York.
Hoy, el Ayuntamiento ha homenajeado a Luis Mari Ormazabal, por su aportación desinteresada, con la colocación de una placa en el archivo local.