Una especie de islas donde se agruparán todos los contenedores para evitar el “peregrinaje”, de un punto a otro, a la hora de depositar los residuos domésticos.
Cuando finalice la habilitación de los 32 previstos, todos los barrios del municipio dispondrán de estos espacios.
El Ayuntamiento va a invertir 40.000 euros en esta primera fase.