Cierto es que, con los actos suspendidos, entre ellos la multitudinaria bajada, Koskojales no ha registrado la concentración de gente de otros años, pero sí ha mantenido cierto ambiente festivo en las terrazas de los bares que han abierto.
Momento especialmente emotivo se ha vivido cuando Los Barbis han interpretado para el directo de TELE7 la canción de la Virgen de La Guía:
Los bares que han decidido abrir han registrado reservas llenas para comer; sin duda un alivio después de haber estado más de 2 meses cerrados.Lo hemos podido comprobar en la plaza de La Rantxe:
Las calles cortadas, como es el caso del Ojillo, han permitido celebrar la más entrañable fiesta jarrillera de forma ordenada y sin masificaciones.