«No se trata de cerrar el parque sino de delimitar la zona dónde está permitido soltar el perro», ha explicado el concejal de medio ambiente, Iker Villalba.
El Ayuntamiento ha colocado un vallado perimetral en el espacio verde situado junto a la avenida Kanpanzar, cumpliendo una petición del AMPA del colegio público Ruperto Medina.
La intención es hacer lo mismo en el parque de La Florida con el objetivo de diferenciar claramente el espacio destinado al esparcimiento de mascotas de la futura zona de juegos infantiles cubierta.